Educación en primaria


La educación en primaria está compuesta de 6 años de carácter obligatorio, que cursan los alumnos y alumnas entre los 6 y 12 años de edad. Se trata de enseñarles todo lo que deben saber sobre comprensión oral, escrita, lectora; así como cálculo, habilidades artísticas y creativas y cultura general.

La educación recibida en este período no sólo es a nivel académico, sino que engloba una serie de habilidades personales que facilitarán a los alumnos su desarrollo como personas. ¿Tu hijo está a punto de comenzar su educación en primaria y tienes algunas dudas? ¡Estás de suerte! A continuación, resolveremos todas tus dudas y te proporcionaremos toda la información que debes saber para poder acompañarle adecuadamente en esta etapa tan importante de su vida.

Lo fundamental

  • La educación primaria es una fase crucial en el desarrollo de los niños. En esta etapa se les enseñarán los básicos académicos, gracias a los cuales podrán continuar su estudio y desarrollo en un futuro: cálculo, escritura, lectura, exposición oral, comunicación y cultura.
  • Toda España cuenta con los mismos campos de estudio en esta etapa, con el objetivo de conseguir que esta generación se forme de la misma manera óptima.
  • Será incluso más importante lo aprendido en el terreno personal: aprender a vivir y comunicarse con los demás, desarrollar sus habilidades y ser capaces de aprender a formarse y sacar lo mejor de ellos mismos.

9 tips imprescindibles a seguir en la educación en primaria

Al tratarse de una etapa tan importante y llena de cambios para tu hijo, es normal estar desesperado por saber qué hacer. Lo más importante es mostrar apoyo y ayudar en todo lo que necesite. A continuación, te daremos unos tips para facilitar este proceso y que sea mucho más óptimo y sencillo para tu hijo, mientras que aprende al máximo.

1. Llevar la tarea al día

El objetivo de las tareas escolares en la educación primaria es que el alumno refuerce lo que ya ha aprendido en clase. Son de obligado cumplimiento y normalmente son revisadas en clase, por lo que es importante que los niños lo hagan bien. Además, es importante que lo hagan solos en la medida que sea posible. Sin embargo, podrán utilizar la ayuda de sus padres en casa si fuese necesario.

¿Cuántas horas al día deben dedicar a la tarea?

Los niños españoles cuentan con una de las mayores cargas de deberes en el mundo. Aproximadamente le dedican de 3 a 4 horas a los deberes y estudios, realizando unas pausas de unos 15 minutos.

Sin embargo, no se recomienda pasar de las 2 horas. Dejando tiempo para que los niños puedan realizar actividades extra escolares, también cruciales para su desarrollo como lectura, juegos en familia o ejercicio.

Muchas veces los niños llevan mochilas cargadas de peso innecesario. Es importante enseñar a tu hijo a sólo coger los libros o materiales que realmente vaya a necesitar para sus tareas, para que se evite dolores físicos.

Ayuda a que tu hijo cree amistades que duren toda la vida. (Fuente: pham: 0DPyb8t_KfI/ unsplash.com)

2. Prestar atención en todas las clases

Si se presta atención en clase, la tarea y el estudio de las asignaturas será mucho más sencilla, quitándose un gran peso en términos de tiempo y esfuerzo. Pero prestar atención en clase, dependiendo de cómo sea la asignatura e incluso el profesor, puede suponer muchas veces un reto para los alumnos.

¿Qué factores ayudan a que los alumnos presten atención en clase?

  • Dormir bien
  • Tomar apuntes
  • Dejar espacio para notas
  • Sentarse relativamente cerca del profesor
  • Hacer preguntas
  • No vestirse demasiado cómodo

Influyen varios factores que dependen del alumno en sí, como tomar notas, sentarse cerca para poder atender mejor y ver bien la pizarra o hacer preguntas a los profesores para no quedarse con ninguna duda. Sin embargo, como padres, también se puede influenciar en este aspecto. Es importante que los niños duerman bien, para que rindan en clase, no estén cansados y evitar que estén con sueño; lo cual dificulta su atención. También es preferible que no se vistan de manera muy cómoda, que se arreglen de cierto modo para que mentalmente se le dé importancia a lo que están haciendo: ir a clase.

3. Estudio al día

Dependiendo del curso en el que esté tu hijo, tendrás que esforzarte en que dedique más o menos horas al estudio. Normalmente se recomiendan 4 horas, pueden ser menos o más en caso de estar en período de exámenes.

Es muy importante hacer descansos productivos. Especialmente en matemáticas, asignatura que se suele atragantar a los niños. Si no les sale un problema después de dedicarle bastante tiempo, que prueben a hacer otra tarea. Tras un rato de desconexión, hay muchas más posibilidades de que les salga mejor en el segundo intento.

Como padre, podrás preguntarle la lección a tu hijo; además de explicarle todo lo que te pregunte. Si no sabes la respuesta, ¡no pasa nada! Podéis intentar averiguar o buscar juntos una respuesta.

4. Esfuerzo en los exámenes

El período de exámenes suele provocar nervios y estrés en los niños, sobre todo si están en colegios exigentes. Si han llevado la tarea y estudio al día, tienen una gran parte de la nota asegurada. Aún así, durante este período es importante que repitan y memoricen bien lo que les caerá en el examen.

Como padre, debes asegurarte de que tu hijo esté tranquilo y relajado. Por mucho que se sepa la respuesta, los nervios pueden jugarle una mala pasada en el examen. Es importante también que descanse lo suficiente, durmiendo al menos 8 horas para poder rendir. Tu labor en estas semanas será la de acompañar, emocionalmente y también académicamente haciendo seguimientos de su conocimiento, a tu hijo en todo lo que necesite. ¡Es una oportunidad genial para demostrarle cuánto te preocupas por él y su formación!

5. Participar en actividades extraescolares

Hoy en día, debido al mundo en el que vivimos, tu hijo debe aprender idiomas; ¡inglés como mínimo! Aunque tenga esta asignatura en el colegio, una muy buena actividad extraescolar sería un idioma. De esta manera, se atreverá a hablar y desenvolverse. También es muy importante que en esta etapa de su vida comience a acostumbrarse al ejercicio. Los expertos recomiendan dedicar al menos 45 minutos a hacer ejercicio 5 días a la semana.

Otras actividades como artes y manualidades, baile, artes marciales, aprender a tocar un instrumento o clases de cocina también serán muy beneficiosas para el desarrollo de tu pequeño e influyen en su capacidad para socializar.

¡Ayuda a tu peque si te necesita! (Fuente: sung: xH04gkmk1sg/ unsplash.com)

6. Fomentar la relación con los compañeros

Que tus hijos tengan una buena relación con sus compañeros será imprescindible para que disfruten asistiendo a las clases. Deben crear relaciones de confianza, sinceridad, compañerismo y amistad. Muchas de las amistades nacen a edades muy tempranas y gracias a cuidar de ellas, algunas duran para toda la vida.

Pero, ¿cómo puedes hacer como padre que tu hijo tenga una buena relación con sus compañeros?

  • Pregunta sobre ellos, muestra interés.
  • Aconseja qué hacer o ayudarles a resolver conflictos con ellos.
  • Apóyalo en sus planes con amigos de clase.
  • Propón una tarde en casa con los amigos de tus hijos.
  • Preséntale a niños con los que pueda crear relaciones de amistad.
  • Y sobre todo, respeta y no juzgues a sus amistades.

7. Mantener una comunicación fluida y respetuosa con los profesores

Es importante que los niños sean respetuosos con los profesores y tengan una buena actitud, siendo receptivos y dispuestos. No hay que pensar en los profesores como aquellas personas que califican a tus hijos, sino como sus verdaderos mentores. Pues, son ellos quienes les enseñan y con los que pasan la mayor parte del día a día. Especialmente en educación primaria, todo lo que ellos les enseñen, se les quedará toda la vida grabado.

Hay que animar a los niños a preguntar todas sus dudas a los profesores, a huir de la vergüenza; para así aprovechar al máximo las clases. Esto también les simplificará la labor de realizar los deberes y exámenes. Es importante, que aún estando en desacuerdo con los profesores, no se comente con los hijos directamente. Tienen que entender bien la figura del profesor y respetarlo. Si se está en desacuerdo, sólo es cuestión de dialogar.

8. Compartir inquietudes con familiares

También es fundamental que si falla o se equivoca, tengas paciencia. No le hagas sentir que no vale o que es demasiado difícil para él, pues le crearás un complejo de superioridad difícil de erradicar.

Es normal que quieras lo mejor para tu hijo, en lo personal y académico y que tu objetivo es que saque las buenas notas que creéis que merece. De no ser así, no te enfades con él ni le hagas sentir que no sirve para nada, si has visto esfuerzo a lo largo del curso. Prueba a enfocarlo de otra manera. Presta atención a pequeños detalles que quizás se os hayan escapado a lo largo del año, busca otro método de estudio que funcione mejor o incluso intentar hablar del problema con el tutor de tu hijo.

9. Mantener una buena salud mental y física

Como padres, hay que reforzar la salud de los niños: física y mental. Deben hacer ejercicio, practicar algún deporte en equipo, al menos 5 veces a la semana. Sería genial que en caso de participar en torneos, campeonatos o incluso partidos en el colegio, los padres mostrasen su apoyo.

Es crucial, especialmente hoy en día, cuidar la salud mental de nuestros niños. Saliendo de una crisis en todos los ámbitos, ha afectado a todos y también a los más pequeños. Por eso, hay que cuidar de su salud mental. Dialogar y comunicarse bien con ellos, escucharles y ayudarles en todo lo que sea posible y pedir ayuda de expertos en caso necesario.

Resumen

La educación primaria es una de las más importantes para el desarrollo, personal y académico, de los niños. En esta etapa de sus vidas aprenderán todo lo básico para poder desarrollarse como personas en un futuro, además de conocimientos en materias principales que utilizarán a lo largo de la etapa escolar.

El esfuerzo que harán los niños en este período de tiempo no debe caer en vano. Es una etapa fundamental para los niños y necesitan del apoyo, cariño y atención de los padres. Son precisamente los padres quienes más pueden ayudarles a rendir al máximo y sacar todo el provecho posible a esta gran etapa.

(Fuente de la imagen destacada: cdc: GDokEYnOfnE/ unsplash.com)

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